Lihi Jacobi

Estudiante Erasmus de Grado de Derecho

Facultad de Derecho

Universidad de Granada/ Ha Universita Halvrit Be Yerushalaim

Me llamo Lihi, hoy día soy estudiante de segundo grado en la Universidad Hebrea de Jerusalén. Hice mi primer grado en derecho y “Amirim” – el programa de excelencia de la facultad de humanidades, y participé en el programa de intercambio en la Universidad de Granada en el curso de 2020-2021. Durante mi primer grado, estudié la lengua española como parte de Amirim, y luego, debido a mi gran curiosidad, participé en varias asignaturas de historia y literatura española y latinoamericana. Por mi creciente interés en el idioma y la cultura española, elegí estudiar un semestre en España, y para mi gran suerte aceptaron mi solicitud de estudiar en la UGR. Era mi sueño volver a visitar a Granada, en la que estuve un año antes del intercambio.

Mi experiencia en la UGR era fantástica en el aspecto académico tal como en el aspecto personal. Estudié cuatro asignaturas de dos facultades diferentes – la facultad de derecho y la facultad de filosofía y letras. Así, tenía la oportunidad de conocer temas distintos de la cultura española que correspondieron con mi grado, y también aumentar significativamente mi nivel de español.

En la facultad de derecho, estudié sobre la violencia de género en el sistema judicial española, en una asignatura fascinante que focalizó en el aspecto teórico del tema como también en los procesos penal y civil en casos de violencia de genero. Además, estudié sobre la delincuencia juvenil en España, otro tema que me interesa mucho. Ahora, más que un año después del intercambio, veo cada vez más que la información que adquirí en estas asignaturas me ayudó a entender mejor el sistema judicial israelí (que es parte del “common law”), y compararla con sistemas diferentes, especialmente sistemas continentales como el español. Ahora, durante mi aprendizaje en el ministerio de justicia israelí, estoy analizando las leyes israelíes en comparación con leyes españoles que conocí, y esto me ayuda muchísimo mejorar mi trabajo y aumentar mi conocimiento del mundo legal.

En la facultad de filosofía y letras estudie dos asignaturas de literatura – literatura árabe de la modernidad, y literatura española del siglo de oro. La última sirvió como una base importante para las próximas asignaturas que estudié en Israel, principalmente una asignatura sobre Don Quijote de La Mancha, la obra más importante del siglo de oro español. Tras descubrir este mundo fascinante de literatura española y leer obras maestras en su idioma original, este año estoy empezando mi segundo grado en el departamento de estudios ibéricos en la universidad hebrea. Sin duda, mi experiencia en la UGR me abrió una ventana a este fascinante mundo y me enseño que, aunque el idioma de obras maestras del siglo de oro sea más antigua y difícil, se puede disfrutar muchísimo de la lectura y de la investigación.

En la asignatura de literatura árabe de la modernidad, trasmitida por el profesor Akram Jawad Thanoon, trabajé con dos idiomas – el árabe y el español (ninguno es mi lengua materna), y practiqué la habilidad de traducción de poesía. Además, conocí por primera vez la belleza de la cultura árabe y su literatura especial, con un profesor nativo de un país árabe que habla el idioma. Gracias a esta asignatura, mejoré mi árabe y mi español y conocí un tema nuevo que sigo investigando en mi tiempo libre.

Aparte de las excelentes asignaturas que estudié en la UGR, otro elemento que contribuyó a mi buena experiencia en el intercambio era la ciudad de Granada. Me enamoré de esta ciudad tan bella y especial, con el increíble Alhambra, los barrios con tanto carácter y el clima maravilloso. Es verdad que el Covid-19 afectó la ciudad (como he indicado, tenía la suerte de visitarla un año antes del virus), pero en ningún momento la ciudad no era muerta y aburrida, y siempre había algo que ver o que hacer. Intenté en mi tiempo libre tomar paseos por los barrios bonitos de Granada, visitar museos y ver paisajes. Visité, por ejemplo, en varios pueblos de la Sierra Nevada – en Lanjarón, Cañar, Soportújar etc, y caminé por las calles del Albaicín para ver la Alhambra por todos sus ángulos. Fue una experiencia única, y me alegro de que pude disfrutarla a pesar de la situación mundial tan difícil.

Para mi gran suerte, durante el intercambio viví con dos jóvenes locales de la ciudad de Granada, que me ayudaron conocer la zona y practicar mi español. Debido a los estudios online que empezaron en la mitad del semestre, no pude conocer muy bien a los estudiantes españoles que participaron en las asignaturas que elegí. Por eso, mi decisión de vivir con locales (y no con estudiantes de intercambio de otros países), resultó ser muy importante para mi experiencia – tenía la oportunidad de ver la ciudad desde los ojos de la gente adecuada, y por esto también estoy muy agradecida. Además, estoy manteniendo el contacto con mis compañeros de piso hasta hoy, y en cuanto vuelva a visitar la ciudad (ojalá sea pronto), estoy segura de que los veré.

Quiero mencionar también que durante mi tiempo en España sufrí una crisis personal, que afecto mi experiencia. Gracias al personal de la UGR, que me ayudó muchísimo, podía superar esta crisis y quedar en Granada hasta el fin del semestre. Aunque estaba lejos de casa, sentí que necesito continuar con los estudios fascinantes y disfrutar de la ciudad de Granada. Ahora, más que un año después, estoy segura de que elegí correctamente. La crisis personal ya pasó, y lo que me queda de esta época es mi gran experiencia del intercambio, los temas diversos que aprendí, los amigos que conocí y la belleza de Granada.

Quiero agradecerles la oportunidad de entregar mi solicitud para el premio de excelencia del curso 2020-2021. Tenía una experiencia maravillosa en Granada en todos los aspectos, y espero poder visitarla otra vez muy pronto.

Lihi Jacobi